La familia y los amigos íntimos muestran con frecuencia dificultad para entender algunas de las conductas de nuestros hijos
autistas, debido a que desconocen del tema y aplican criterios tradicionales que no encajan con su situación; de ahí se sugiere que
también dispongan de información clara al respecto.
A continuación, nombraremos algunos de los comentarios y dudas que frecuentemente expresan, y un modo en que podemos
responderlas:
¿A qué se debe el autismo de tu hijo?
Podemos responder con toda seguridad que es un trastorno neurobiológico del que se desconoce con certeza su causa, sin
embargo, se sabe que la genética juega un papel fundamental.
Si tiene una causa genética, ¿de qué familia fue la culpa?
Es algo imposible de averiguar, pues no se transmite siguiendo una pauta recesiva o dominante que pase de padres a hijos.
Pero, tú también eras así de pequeño…
Si bien puede haber una similitud en la conducta del menor con la que sus padres tienen o tuvieron (ser reservados, solitarios, o
tímidos), es algo completamente diferente al implicar una alteración en su desarrollo; de modo que este juega, se relaciona y
comunica de manera distinta.
Creo que no me quiere…
Tiene un modo distinto de expresar el cariño que siente, no debemos esperar de él los gestos estandarizados de afecto, sino estar
atentos a su propio modo de manifestarlo (saltos, gritos, aleteos, etc.).
¿Cómo va a ser autista si es muy cariñoso?
Que le guste el contacto físico no confirma ni descarta el trastorno, pues no es un factor decisivo en su diagnóstico.
¿Tiene cura?
Por el momento no, pero puede progresar en su desarrollo con estimulación y tratamiento.
Y todas sus rabietas, ¿no se deberán a que, en parte, consientes que se salga siempre con la suya?
No, esto se debe a la alteración que hay en sus procesos de comunicación e interacción social, dado que tiene un modo distinto de
pensar y se le dificulta comprender el mundo desde nuestros ojos.
¿Por qué no vienes con nosotros de vacaciones o fin de semana?
Porque de momento nuestro hijo requiere una rutina clara y previsible, debido al malestar que le provoca el cambio. Saldremos más
adelante conforme evolucione, para apoyarlo.
¿Por qué necesita todas esas fotografías?
Porque facilita su comprensión, pues aprende mejor visualmente.
Dáselo, pobrecito…
Tener una imagen excesivamente condescendiente y poco exigente no le ayuda a mejorar, por eso no hay que ayudarle de más.
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